Tal y como se adelantó la semana pasada, Agua y Drenaje de Monterrey comenzó con la instalación de reductores en domicilios que utilizan una cantidad de agua mayor a la recomendada por la paraestatal.
Aunque no se dieron datos exactos de las zonas recorridas o de dónde se concentra la mayor parte de los usuarios ´’gastones’, trascendió que se planean instalar alrededor de mil 800 de estos equipos auxiliares durante los próximos días.
Los domicilios ‘castigados’ serán los que registren un consumo superior a los 70 mil litros cúbicos de agua; con ello, el suministro se reduciría en un 40 por ciento para el usuario, adicional a las medidas de restricción que ya se encontraban funcionando anteriormente.
En caso de que el usuario sea reincidente, la presión en su servicio podría verse reducida de nuevo, esta vez hasta el 10 por ciento.
La instalación de reductores es sólo una de las medidas tomadas por Agua y Drenaje para evitar un consumo excesivo durante la crisis de agua en Nuevo León; apenas ayer, se oficializaron multas para quienes rieguen sus jardines o laven automóviles con agua potable con previa inspección por parte de Protección Civil del Estado.