El famoso y controversial ex penal del Topo Chico, inició por la tarde de este martes los trabajos de demolición.
El penal se encontraba en la colonia Morelos, en el cruce de las avenidas Palacio de la Justicia y Rodrigo Gómez.
Decenas de máquinas empezaron a tumbar las celdas que habitaban los reos en lo que fue la prisión más antigua y peligrosa de Nuevo León.
Este reclusorio fue escenario de varios motines con saldos lamentables, ya que se encontraban los reos más peligrosos y fueron trasladados a otros penales.
Algunos fueron trasferidos a los Ceresos de Apodaca y Cadereyta.
Luego del cierre, el Gobierno del Estado abrió el ex penal para que los ciudadanos conocieran como vivían los internos en la prisión que fue escenario de diferentes masacres.
El gobernador Jaime Rodríguez fue quien cerró de manera definitiva las instalaciones, el pasado 30 de septiembre del 2019.
Rodríguez explicó que las instalaciones serían demolidas para dar paso a la construcción de un parque público en el espacio de unas 10 hectáreas.