Luego de la fuga de combustible de una toma clandestina que provocó una fuerte explosión, durante el viernes de la semana pasada en Hidalgo, ahora la cifra de víctimas fallecidas ha aumentado.
Según informaron las autoridades gubernamentales, las personas muertas tras el incidente son 114, mientras que 33 permanecen con heridas de gravedad.
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Gracias a documento que publicó el estado, se dio a conocer que 33 personas continúan hospitalizadas por presentar heridas, mientras que ya fueron localizados 68 restos humanos de los cuales 16 han sido identificados y entregados a sus familiares.
Hay que recordar que el pasado 18 de enero un grupo de pobladores del municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo, fracturaron un ducto de hidrocarburo para comenzar a robar el combustible.
Sin embargo, después de unas horas, y pese a la presencia de miembros del Ejército mexicano, se registró una fuerte explosión en la zona.
La explosión ocurrió en medio del combate que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador mantiene contra quienes roban combustible en el país desde hace años.
Hasta el momento, las autoridades han reforzado la seguridad en los ductos de hidrocarburos; además y han transportado más gasolina en pipas, situación que ocasionó desabastecimiento en 10 estados del país durante los primeros días del 2019.