Tras la falta de funcionarios de casillas de votación, muchas de ellas se encontraban desatendidas y los que se encontraban laborando en ellas, buscaban apoyo de otros ciudadanos cuando se encontraban votando.
En la colonia Sierra Ventana, al sur de la ciudad, la señora Blanca Aurora Medina, fue la gran salvadora de una de las casillas de dicha colonia, cuando ella iba solo a cumplir con dar su voto.
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Dado que no había suficientes funcionarios para comenzar los sufragios, le solicitaron ayuda para conformar la casilla y ella accedió «para que no vuelva a pasar lo de la vez pasada».
Alrededor de las 9:30 de la mañana, la señora Medina se encontraba en la fila a la espera de votar, de pronto una funcionaria del INE la invitó a ser parte de las elecciones tomando el puesto de primer escrutador.
La decisión no era para nada fácil, ya que este día le tocó cuidar a sus nietos, sin embargo, el deber cívico la hizo quedarse con el propósito.
«Esto es por el bien de todos, me invitaron y no pude negarme, no me voy a dar mi taco de que no lo iba a hacer.
«Dejé a mis nietos solos, los estaba cuidado y los dejé, ahora me tocó y voy a estar al pendiente», dijo.
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Como ciudadana ¿qué garantía les da a los votantes que la elección será transparente?, se le cuestionó.
«Ahora será transparente porque voy a estar yo aquí al pendiente», dijo la vecina de la colonia Sierra Ventana.
Hasta las 13:30 horas la casilla de la sección 1325 instalada en la escuela primaria Pablo Livas en el referido sector, presentaba escasa afluencia de votantes de acuerdo a la versión de los mismos funcionarios.