Hizo falta sólo un día de acusaciones en redes sociales, para que la firma italiana Prada admitiera su culpabilidad al comercializar un producto con tintes racistas y lo retirara de sus tiendas en Nueva York.
Fue uno de sus personajes de la línea Pradamalia el que causó indignación entre la gente pues guardaba un gran parecido con las caricaturas racistas conocidas como «blackface» (cara negra): rostros de negros con los ojos abiertos de par en par y gruesos labios que, en los siglos XIX y XX, sirvieron para ridiculizar a los negros, mostrándolos como ignorantes, ingenuos o perezosos.
La protesta en redes sociales comenzó cuando una joven abogada publicó varias fotos de un escaparate de Prada en el Soho neoyorquino. En las imágenes se aprecian una especie de esculturas con la figura de un mono.
Al principio, la marca se defendió, argumentando que se trataba de «criaturas imaginarias sin referencia intencional del mundo real» y aseguró que los artículos que se retirarían de la venta, pero tras verse envueltos en un llamado al boicot, cambiaron de postura.
«Queremos transmitir nuestro profundo arrepentimiento y nuestras disculpas sinceras por los productos Pradamalia que han ofendido. Han sido retirados del mercado y no serán vendidos», indicó la firma en un comunicado.
We are committed to creating products that celebrate the diverse fashion and beauty of cultures around the world. We’ve removed all Pradamalia products that were offensive from the market and are taking immediate steps to learn from this.
Full press release attached. pic.twitter.com/rKhnKjasDz
— PRADA (@Prada) December 16, 2018
En este momento, la página oficial de la marca y de su línea Pradamalia están activas y han retirado cualquier rastro de la polémica figura.