Apenas se hizo pública la noticia sobre el aumento de impuestos vehiculares que se aprobó en el Congreso del Estado de Nuevo León, los regios no tardaron en hacer evidente su inconformidad.
Sin embargo el polémico gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, se ha encargado de asegurar que dicho incremento en el refrendo no afectará a todos los ciudadanos, sino solo al 10% de los automovilistas.
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Al parecer, en el estado existe un padrón de aproximadamente 2 millones 100 mil vehículos, de los cuales las autoridades correspondientes afirman que cerca del 70% tienen subsidio.
“Del otro 30% de vehículos, casi el 20% son empresas y negocios”, señaló el mandatario.
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Además, el estado justificó el incremento en impuestos vehiculares, al decir que los 400 millones de pesos que se recauden adicionalmente serán destinados a implementar medidas para evitar la contaminación.
A su vez, el gobernador aprovechó para mencionar que la refinería de PEMEX en Cadereyta todavía no es segura, puesto que se trata de una empresa que genera muchos residuos contaminantes.