Luego de llevarse a cabo varios operativos de decomiso de drogas durante las últimas semanas en el estado, el pasado miércoles se incineraron más de ocho toneladas de sustancias tóxicas.
Los narcóticos se encontraban resguardados en bodegas de la Delegación de la Procuraduría General de la República en Nuevo León.
Según el reporte de las autoridades lo decomisado pertenecía a 25 expedientes de investigación, y la incineración se realizó en las instalaciones de la Séptima Zona Militar.
Las drogas fueron destruidas en presencia de representantes de la Sedena, PGR, Policía Federal, entre otras autoridades, siendo 7 toneladas 992 kilogramos marihuana y el resto estupefacientes sintéticos.